Motivación y voluntad, valores en la clausura del “Curso de operario de almacén” de Noesso

El “Curso de operario de almacén” ha sido organizado por la Asociación No Estás Solo (Noesso) en el marco del programa Reincorpora de la Obra Social ”la Caixa”, contando con la colaboración del centro penitenciario “El Acebuche”, y se ha venido desarrollando desde el pasado 6 de junio hasta el 30 de julio, con una duración de 309 horas (254 horas de formación teórico-práctica, 40 horas de servicio a la comunidad y 15 horas de prácticas).

Ha sido un itinerario de formación orientada a facilitar la cualificación y la efectiva inserción laboral de personas en situación o riesgo de exclusión. Por esta razón una vez que termina la fase formativa continúa el proceso con un trabajo individualizado con cada uno de los internos, desde el programa Incorpora, que gestiona igualmente NOESSO, y que financia la Fundación la Caixa, para lograr la inserción laboral de estas personas. 

Un logro de muchos

El acto de clausura contó con la asistencia de representantes de las tres instituciones que han hecho posible la impartición de este curso. La Obra Social “la Caixa” estuvo representada por Jesús Vega, director del área de negocio Almería 1 de “la Caixa” y Patricia Maldonado, gestora territorial de la Fundación la Caixa en Andalucía Oriental.  En cuanto al Centro Penitenciario de Almería “El Acebuche” asistió su director, Miguel Ángel de la Cruz. Por parte de la Asociación Noesso estuvieron presentes en el acto de clausura su presidenta, María Luis Martín, el director de Noesso, Juan Sánchez Miranda, el director de Centros, Miguel Martín y el responsable de Formación, Francisco García.

Al acto asistieron también representantes de empresas y organizaciones humanitarias que han prestado su apoyo a este proyecto. Estaba previsto que asistiera una representación de Vicasol, empresa en la que los alumnos han realizado prácticas laborales. El Banco de Alimentos de Almería estuvo representado por su vicepresidente. En esta organización ha sido donde los alumnos han prestado el “servicio a la comunidad” dentro de la actividad formativa. También asistió Concha Cirera, directora de la Escuela de Formación Profesional de Vícar, a través de la cual se ha hecho la programación del curso.

Crecimiento personal

Los profesionales que han realizado el trabajo diario con este alumnado, tanto profesores como educadores, además de felicitar a los internos resaltaron el buen clima vivido, el aprovechamiento del tiempo formativo y las buenas relaciones surgidas en estos meses de la convivencia.

Jesús Vega, por su parte, destacó en sus palabras que la Obra Social de la Caixa, a pesar de la crisis, sigue invirtiendo buena parte de sus beneficios en las personas más vulnerables de la sociedad, y destacó que este año se han dedicado a estos fines más de 500 millones de euros, por sexto año consecutivo.

También intervino Miguel Ángel de la Cruz, quien señaló que la colaboración en medidas formativas de este formato forma parte de la legislación vigente en materia penitenciaria. Todo el tiempo en que los reclusos permanecen en el centro debe estar orientado a ofrecer oportunidades a los internos, para posibilitar el retorno a la libertad de quienes están privados de la misma, temporalmente.

Juan Sánchez, director de Noesso, resaltó en su intervención el agradecimiento de esta asociación con aquellas otras instituciones que han participado en esta iniciativa, ya que de dicha colaboración se ha hecho efectivo un tiempo de libertad y de crecimiento personal para los alumnos. Esta formación “ha sido un verdadero regalo para los internos y para quienes hemos tenido la suerte de acompañarles”. 

Servicio a la comunidad

El grupo de alumnos ha participado en lo que el programa formativo denomina “servicio a la comunidad”. Se trata de que todos los que participan como alumnos, y que han recibido un servicio de la comunidad, respondan aportado algo a favor de los demás de manera altruista. De ahí la participación del Banco de Alimentos, donde el grupo de internos ha desarrollado sus 40 horas de servicio solidario. “Allí, hemos aprendido que hay muchos otros que tienen necesidades, de otra manera diferente, pero que en esta sociedad todos estamos necesitados de una u otra forma de todos”, señalaba una de las participantes del curso, que tomó la palabra para agradecer la oportunidad vivida.

Actividades formativas como ésta hacen posible subir un peldaño más para el viaje definitivo a la libertad, para que hombres y mujeres con ganas de vivir la vida tengan más fácil encontrar un empleo con el que abrirse camino de nuevo.